Cada vez más familias en España viajan con sus mascotas, ya sea en escapadas cortas o en largos trayectos vacacionales. Y si hay algo que todo conductor responsable sabe, es que la seguridad en carretera no se limita a tener el coche con las revisiones al día o a usar recambios de calidad: también incluye garantizar que los animales viajen protegidos y cómodos.
Un vehículo bien mantenido y equipado se convierte en un espacio seguro para todos sus ocupantes, incluidos los de cuatro patas.
1. La normativa: seguridad que protege a todos
La Dirección General de Tráfico (DGT) exige que las mascotas viajen sujetas para evitar distracciones y accidentes. La lógica es la misma que cuando sustituimos una pieza desgastada: prevenir riesgos antes de que ocurran.
- Multa por incumplimiento: hasta 500 €
- Riesgo real: un perro de 20 kg en un frenazo puede proyectarse con la fuerza de 700 kg
Un animal suelto en el habitáculo multiplica el peligro, igual que lo hace un neumático en mal estado o una pastilla de freno gastada.
2. Accesorios ideales para tu viaje.
Así como en el mercado de recambios encontramos la pieza exacta para cada

modelo de coche, para la seguridad animal existen accesorios diseñados para especificamente para proteger durante el viaje:
- Arnés con cinturón homologad → es el equilaente a los sistemas de retención en un coche, que le dara protección a tu peludo.
- Transportín rígido o blando → escoge según el tamaño del animal y el espacio disponible, para asegurar un mayor confort.
- Rejillas divisorias para maletero → estas, aportan estabilidad y seguridad durante el viaje.
- Fundas y protectores → no afectan a la seguridad, pero ayudan a conservar el estado del interior, algo fundamental para cuidar tu coche o si luego planeas venderlo.
Invertir en accesorios es tan importante como elegir un recambio original frente a una copia barata.
3. Preparar el coche (y la mascota) antes de salir
Un viaje seguro comienza antes de arrancar. Igual que revisamos niveles de aceite, presión de neumáticos o el estado de la batería, podemos aplicar esa misma lógica a nuestras mascotas.
Checklist doble:
- Del coche: líquidos, neumáticos, luces, kit de emergencia.
- De la mascota: comida ligera antes de salir, agua fresca en paradas, identificación (chip y collar).
Un fallo en la mecánica o un animal mal preparado pueden convertir el trayecto en un problema evitable.
4. Bienestar en carretera: trucos prácticos
- Paradas cada 2 horas: igual de necesarias para el motor que para las patas.
- Ventilación constante: como revisar el sistema de climatización; los animales son más sensibles al calor.
- Ambiente relajado: vibraciones o ruidos excesivos (del coche o de la música) generan estrés innecesario.
Aquí es clave recordar: un coche que hace ruidos extraños por falta de mantenimiento también aumenta la incomodidad de todos los ocupantes.
5. La homologación garantiza la seguridad.
En el mundo de los recambios, cualquier modificación en un coche desde un spoiler hasta una luz LED necesita estar homologada para circular. Con las mascotas, la lógica es la misma: usar solo accesorios certificados asegura resistencia y seguridad en caso de impacto.
Un arnés barato o un transportín sin certificación puede romperse en un frenazo. Lo mismo ocurre con recambios de baja calidad: lo barato sale caro.
Coche cuidado, mascota feliz, Viaje perfecto.

Viajar con perros o gatos es un placer que cada día tiene mas fanaticos, además, es parte del día a día de miles de conductores. Y la clave para que siempre sea una experiencia agradable, está en el equilibrio: un coche en buen estado, con sus mantenimientos al día y una mascota protegida hacen que el trayecto sea mucho más seguro y agradable.
Así como invertimos en recambios de calidad para alargar la vida del vehículo, también merece la pena invertir en accesorios que ayuden a tus mascotas a sentirse comodas. El resultado es el mismo: menos preocupaciones, más seguridad y viajes más tranquilos para todos.


